HISTORIA... Habia una vez...Corazon de Hada...

Las hadas nos hacen pensar en un mundo de fantasías, brillos y colores, sueños, ilusiones y sorpresas….


Creo que esa ha sido mi característica desde chiquita…. Soñadora, romántica, siempre me gustó jugar con la imaginación y buscar la forma de plasmarla en algo real.


Así fue que, como un juego, nació “Corazón de Hada”.


Puedo recordar como, hace mas o menos 5 años atrás, tomé una tanza y enhebrando canutillos armaba pulseritas y tobilleras de distintos colores y formatos para usar como accesorios de mi ropa, sea informal o de vestir. Una amiga me enseñó a hacer diferentes nudos con hilos encerados, y jugando con mi imaginación fui mejorando la calidad y el diseño de los modelos. Parece que salían buenos porque mis amigas al verlos no tardaron en pedirme que les confeccionara accesorios para ellas, así que, casi sin quererlo, comencé a vender mis diseños entre amigos y conocidos. Lógicamente para mi era sólo un pasatiempo y no se me ocurría pensar en otra cosa…. Después de todo yo tenía mi trabajo administrativo y estaba estudiando una carrera universitaria.


Claro, en mi inquieta imaginación volaban piedras de colores, collares y cadenas, por eso decidí comprar algunos materiales para hacer realidad mis ideas. Hoy sonrío al pensar que trabajaba con las pinzas de la caja de herramientas de mi papá… ¡eran grandes y pesadas!... no era nada fácil trabajar un material pequeño y delicado con semejantes herramientas!!.


Un día me decidí, compré las pinzas apropiadas y me largué a confeccionar collares más elaborados, haciendo rulos de los clavitos, insertando piedras y cadenas… ¡me encantaban!


Estrenaba cada nuevo modelo, y mis amigas querían comprarlo, yo era mi propia vidriera, todavía sigo siéndolo, porque disfruto de lo que hago y me gusta usarlo.


La cuestión es que sin darme cuenta estaba vendiendo mi propia producción, no solo a mis amigas sino a sus conocidas, que a su vez lo comentaban con otras personas.


Qué estaba pasando?... Sentí que Dios me había dado un corazón de hada, con mucha imaginación,…. y la varita mágica?... era la habilidad de mis manos que también me la había dado el mismo Dios… iba a desperdiciar este regalo?


Me gustaba lo que estaba haciendo, quería hacerlo, porqué no pensar en grande?, porqué no tener mi propia empresa y dedicar mi esfuerzo a lo que me gusta hacer?


Corría el año 2007 cuando decidí poner mis planes en manos de Dios, y después de consultarlo… ¡Manos a la obra!. Porque no alcanza con la idea y la imaginación, hay que poner esfuerzo personal, trabajo, tiempo, esto último es lo que me faltaba… ¡trabajando 9 horas diarias!, pero…. como me sobraba pasión, no me molestaba quedarme hasta muy tarde en la noche diseñando y confeccionando accesorios.


Por fin decidí tomar un curso de diseño de accesorios. Busqué información y me anoté, estoy segura que fue en el lugar correcto, en el momento correcto y con la gente correcta. Se que Dios me abrió una gran puerta a partir de mi decisión, y de ahí en adelante las cosas se fueron dando de tal manera que a veces no termino de sorprenderme.


Una alegría y satisfacción importante la tuve al presentar un trabajo en el curso que estaba realizando. Resulta que la profesora nos pidió que realicemos una colección completa primavera verano, estudiando los colores y tendencias, y que presentemos el conjunto para cada momento: pret a porte, casual, etc., con cartera incluida. La verdad es que quería superarme, hacer algo creativo, diferente. Definí un estilo romántico, de acuerdo a mi personalidad, utilicé pedacitos de tela, de raso, desechos, y presenté una colección completa con flores de tela, que mereció el elogio y la felicitación por parte de mi profesora. Esto era un logro muy importante para mí, pero ahí no termina la historia, mi sorpresa y emoción fue cuando la profesora me convoco para participar con ella en un evento junto con su socia.


Así fue como en Diciembre de 2007 participe en un stand en la rural, en la feria internacional de artesanos. Esto último me llevo a poner mi propia marca.


Con una persona que me apoyó desde el primer momento buscamos un nombre que me identificara, y que expresara mi estilo. Mis emociones dieron un salto cuando surgió este nombre: “CORAZON DE HADA”, romántico y soñador, como el estilo de mis diseños.






Estoy agradecida a Dios, porque se que El fue abriendo puertas, yo solo fui entrando en ellas.

Fín